La orquesta más cinematográfica de nuestro país arrasa en taquilla y triunfa en sentimiento con un Constantino Martínez-Orts liderando un equipo de más 70 músicos en el recinto capitalino.
El concierto comienza con una voz en off de la Film Symphony Orchestra explicando el significado y origen árabe de la palabra TARAB, “ese instante único en el que la música nos envuelve por completo, cuando las emociones se desbordan y cada acorde nos sumerge en un mar de sensaciones”. Continuaba destacando que “es la magia de perderse en el sonido hasta olvidarlo todo. Es el éxtasis que sentimos cuando lo humano y lo divino se entrelazan en una melodía, cuando la piel se eriza y el corazón late al ritmo que no podemos explicar pero sí sentir”, para concluir con una petición mientras suenan los primeros acordes del evento, “déjense llevar, permítanse soñar porque esta noche juntos alcanzaremos el TARAB”. Y vaya si lo consiguieron, la de anoche fue uno de esos momentos inolvidables para los espectadores y para la historia de un Alfredo Kraus lleno hasta la bandera.

FSO en TARAB
Es muy difícil explicar con palabras lo que la FSO hace sentir desde que suben al escenario de un auditorio lleno hasta la bandera en esta segunda sesión, colocando el SOLD OUT en las tres jornadas que se están viviendo en la capital grancanaria. Como se encargó de comentar su carismático director, Constantino Martinez-Orts “en Gran Canaria sentimos como el calor del público nos llega desde que pisamos la isla, para nosotros siempre es un honor y un placer el tocar música de película en un escenario tan majestuoso como este”.
A priori y para el gran público puede parecer que este repertorio no es de los más comerciales en la apasionante trayectoria de la FSO que ya han pisado la isla en años precedentes, pero no se dejen engañar por eso, les aseguro que pocas veces he vibrado más en un concierto de Bandas Sonoras como en el de este año. Esa es la verdadera magia de la FSO, te hacen reencontrarte y enamorarte del cine y su música.
Vayan con tiempo antes, durante y después del espectáculo porque podrán inmortalizarse con el photocall especial con personajes muy conocidos por todos los amantes del Séptimo Arte y al terminar el concierto sube el propio director a participar con todos los que deseen hacerse una foto y compartir un ratito con él.

Photocall
No voy a ponerme a relatar tema a tema lo que se vive durante las casi 3 horas que dura el espectáculo, y bien digo lo de espectáculo porque Constantino Martinez-Orts es un director de orquesta alejado de lo habitual y consigue con sus explicaciones previas a cada interpretación que el espectador se acomode, le de al botón del play virtual que tenemos en nuestro cerebro y nos preparemos durante esos 5 minutos de media por tema a revivir las sensaciones que nos transmitieron las películas en su momento.
Si el cine es emoción, suspense, humor y aventura, el concierto avanza por todas estas sensaciones como si fuéramos personajes de “Del Revés”, al comienzo del concierto Orts comenta que “en un repertorio de tanta duración es imposible que estemos todo el tiempo en lo más alto, pero intentaremos que al menos en todo el tiempo estén llegando sensaciones a cada uno de ustedes”. Y doy fe que eso lo consiguen.
Cuando escribo sobre un restaurante de alta cocina suelo describirles platos que me han marcado más durante ese menú degustación de varios platos, lo mismo haré hoy con este menú cinematográfico cocinado por una orquesta que es un lujo para nuestro país.

Constantino Martinez Orts, Director FSO
El momento Leyendas de Pasión con la música de James Horner te hacía levitar sobre la profundidad del Océano Atlántico al caer la noche y que servía de telón de fondo en una imagen para la eternidad. Me sorprendió y cautivó tanto la fanfarria de James Newton-Howard para Animales Fantásticos y como Encontrarlos (saga Potter) que hasta me dan ganas de ver una película que me horrorizó en su momento. La final de la primera parte me hizo llorar de emoción con la “Suite” de Alan Silvestri y su Forrest Gump donde en pocos minutos sentí como si ese Forrest estuviera susurrando al oido de cada espectador esa frase mítica, “la vida es como una caja de bombones, nunca se sabe cual te va a tocar”. Y hoy tocó el bombón bueno, eso está claro.
El segundo acto es sencilla y claramente perfecto desde el primer tema hasta el último. Viajas por un mundo de aventuras con El Regreso de la Momia (Alan Silvestri), homenajeas al más grande compositor del mundo del cine para quien les escribe, John Williams, por medio de su Lista de Schindler y el Episodio IX de Star Wars con un guiño final a la Marcha Imperial, subes al espacio con Gravity de Steven Price o te sumerges en el cine barroco de Christopher Nolan con su inseparable Hans Zimmer en la suite de Origen.
Pero si un tema me marcó de este TARAB fue la suite de Oppenheimer, Oscar a mejor BSO para Ludwig Göransson. Según palabras previas a la interpretación de este momento por parte de Orts, “este es quizás el trabajo más difícil y complejo al que jamás nos hemos enfrentado como orquesta”, para a continuación hacer un minucioso detalle de lo que estábamos a punto de escuchar y el por qué de su complejidad.
Todo eso me hizo hacer algo que no me esperaba en alguien como yo que siempre está pendiente de cualquier mínimo detalle, me propuse cerrar los ojos durante toda la interpretación e intentar viajar por esa película que ya me pareció una obra maestra desde la primera vez que la vi. Y les aseguro que hasta sentí la explosión de esas bombas atómicas en pruebas, los miedos y las dudas de esos científicos convencidos que estaban haciendo historia para la ciencia mientras dudaban si eso era algo bueno para la humanidad. Desde que terminó esa pieza no dejo de pensar en que durante esta Semana Santa buscaré hueco para verla de nuevo.
Me he dejado fuera de manera predeterminada dos temas que emocionaron a la platea. Cerca del final del primer acto la interpretación de una canción que ha pasado a ser propiedad de la cultura colectiva de nuestra generación como es el Let it Go de Frozen y la Suite de La Sirenita con varios de los temas que hicieron eterna este clásico de Disney. En ambas interpretaciones, fundamental y espectacular la voz de esa cantante principal que acompaña la orquesta y que sabe aportar su valor en momentos claves del concierto metiéndose a la audiencia en el bolsillo.
Los bises están hechos para disfrutar, aplaudir y hasta bailar entre músicos y grada, hasta ahí puedo leer….


Momentos del Concierto
En resumen, si usted ha tenido la suerte y fortuna de ir durante las dos primeras sesiones o bien si nos está leyendo antes de acudir a la última (ya con Sold Out), quizás haya experimentado las mismas sensaciones de un servidor seguramente ya estás apuntando las fechas de sus próximos conciertos en el Alfredo Kraus, finales de abril del 2026 con un concierto que se antoja memorable, BSO y Canciones de cine de Dibujos Animados con las interpretaciones de La Bella y La Bestia, Coco, Aladdin, El Rey León, etc etc etc.Y si antes tiene ganas de seguir disfrutando de la Film Symphony Orchestra pueden acudir a varios especiales que tienen este verano en Madrid, para conocer toda la información no duden en visitar su web, www.filmsymphony.es

FOTO 6 Ovación final